martes, 15 de noviembre de 2011



MENS SANA IN CORPORE SANO

Tener una vida sana y satisfactoria   es el ideal a conseguir por el ser humano, para ello es importante adquirir hábitos de vida saludables que le permitan desarrollar todas sus potencialidades tanto a nivel físico como intelectual y social.
Comenzar por una buena alimentación, equilibrada y que incluya todos los nutrientes esenciales que necesita el organismo para su correcto funcionamiento y para reducir el riesgo de padecer de alteraciones o enfermedades que se puedan presentar tanto a mediano  como a largo plazo.
Enfermedades como la hipertensión, la obesidad, la diabetes, trastornos  de la conducta alimentaria o enfermedades cardiovasculares son relacionadas en gran medida por una alimentación desordenada y poco equilibrada.
A nivel de desarrollo y función cerebral también es importante contar con una buena alimentación ya que el cerebro necesita de nutrientes diferentes sustancias proporcionadas por los alimentos.
También es importante la práctica habitual de ejercicio físico ya que al igual que la buena alimentación juega un papel fundamental en la prevención de algunas enfermedades principalmente de tipo coronario al propiciar un mejor funcionamiento pulmonar y del corazón, a nivel cerebral también es muy importante porque al cerebro llega sangre con una mayor concentración de oxigeno el cual es vital en el funcionamiento cerebral.
Evitar el consumo de alcohol, tabaco y sustancias toxicas y que deterioran el funcionamiento general del organismo y dan vía libre al desarrollo de enfermedades como el cáncer.
También es importante tener en cuenta que una vida social satisfactoria, vivir en armonía con los demás, estar integrado al grupo de referencia, sentirse arte y parte de la comunidad a la que se pertenece es un componente importante en el bienestar personal y psicosocial del individuo.
Actualmente el estilo de vida, la sociedad de consumo han generado actitudes y comportamientos, sobre todo en los más jóvenes, donde se brinda un excesivo culto al cuerpo.
 La búsqueda y el deseo de conseguir un cuerpo diez, hace que las personas recurran a prácticas que muchas veces pueden poner en peligro la propia salud, se recurre de forma indiscriminada al uso de la cirugía estética, el desarrollo excesivo del cuerpo mediante horas y horas de gimnasio, la búsqueda de la extrema delgadez como canon de belleza dejando de comer o realizando dietas extremas y sin recomendación médica.
Muchas personas centran todas sus energías en el culto al cuerpo y se olvidad de formarse, de su desarrollo intelectual, de cultivar también la mente, se convierten en personas sin inquietudes, sin aspiraciones y sin una meta en la vida, viven por y para el cuerpo.
Tener un cuerpo sano es importante pero también tener una mente san   a hay que buscar el desarrollo de la mente, educarse, plantearse un proyecto de vida y trabajar para conseguirlo. En definitiva buscar la excelencia personal.

lunes, 14 de noviembre de 2011

EL JUEGO


El juego tiene una gran importancia en el desarrollo intelectual, afectivo y emocional y social del ser humano.

Es la primera “herramienta” con la que construimos nuestro intelecto, nuestras actitudes, valores y nuestro mundo de relación.

El juego espontáneo y libre favorece la maduración y el pensamiento creativo.

Los niños deberían tener suficientes ocasiones para jugar libremente.

Montaigne decía que “los juegos de los niños deberían considerarse como sus actos más serios".

 El juego libre y espontáneo está lleno de significado porque surge con motivo  de procesos internos que aunque nosotros no entendamos debemos respetar.

Si se desea conocer a los niños –su mundo consciente e inconsciente– es necesario comprender sus juegos; observando éstos descubrimos sus desarrollos mentales, sus aprendizajes, sus preocupaciones, sus miedos, y todo aquello que no pueden expresar con palabras y que encuentran su expresión a través del juego.



TIPOS DE JUEGO


Los tipos de juegos de los niños muestran su propio desarrollo dentro de sus etapas evolutivas, así tenemos estos tres niveles de juego:

- Etapa de las adquisiciones sensoriomotrices.  Se producen las primeras
formas de juegos: juegos funcionales, juegos de acción, de sensaciones y de movimientos.

- Etapas del pensamiento preoperatorio y de las operaciones concretas. Se dan juegos más elaborados: juegos de ficción o simbólico y juego de representación.

- Etapa del pensamiento formal y de la abstracción. Se entienden los juegos en toda su complejidad: juegos reglados y estructurados, deporte, juegos de competición.

El juego simbólico o de ficción es el juego infantil por excelencia. El niño,  teniendo que ir adaptándose a un mundo adulto y a una realidad que aún no comprende, elabora, dentro de sus capacidades cognitivas, un lenguaje simbólico para ir comprendiendo ese mundo externo.

 Así, por medio del juego de ficción o simbólico el niño asimila poco a poco ese mundo externo, lo elabora y se adapta a él en un proceso continuo de maduración.

A través del juego se aprende un aspecto importante de desarrollo: la adaptación entre lo imaginable (todo es posible) y lo permitido (reglas del juego y de conducta), en la que el niño tiene que ir aprendiendo entre los comportamientos que son posibles y correctos y los impulsos que hay que ir controlando y superando.





Por tanto una de las cosas más interesantes y valiosas que los padres pueden hacer por sus hijos es jugar con ellos desde los primeros meses de su vida. El juego es útil para el desarrollo del niño en casi cualquier edad, pero lo es más especialmente durante los cinco primeros años. Sin embargo esto no quiere decir que se debe limitar sólo a los cinco primeros años, sino que el juego debe ocupar un lugar importante en la vida.





domingo, 13 de noviembre de 2011

FRACASO ESCOLAR


Uno de los problemas más graves con los que se enfrentan los padres de hoy es el fracaso escolar de sus hijos, ya que este no solo puede influir en la felicidad del hijo, en su propia autoestima y en su futuro, sino que puede alterar también la armonía familiar.

Los padres pueden intervenir de una forma positiva en el éxito escolar, igualando o incluso superando la influencia de las capacidades intelectuales del hijo, su ayuda y motivación contribuyen a la obtención de mejores resultados.

Elementos de la personalidad como la motivación, la responsabilidad, constancia, esfuerzo, sacrificio, tolerancia a la frustración, etc. tienen que ir construyéndose desde pequeños, y son imprescindibles para los estudios.

Los alumnos deben hacer lo que se les exige en el colegio, y los padres deben saber que para la mayoría de las tareas no se necesita una inteligencia superior, la motivación y el esfuerzo son más determinantes.

La responsabilidad consiste en la capacidad de tomar decisiones de una forma independiente para hacer lo que se ha comprometido o lo que más conviene en cualquier situación.

Es decir, en el caso de los hijos es el funcionamiento en el que ya no necesitan de los adultos para que les digan en todo momento lo que tienen que hacer.

Con un nivel alto de responsabilidad tendrán muchas más posibilidades de rendir en el colegio que los que necesitan que se les insistan constantemente.

En los primeros años escolares, los niños dependen de los adultos que les dirigen, motivan y les aconsejarán lo más conveniente en todas las circunstancias.

A medida que van creciendo se debe armonizar dos procesos inversos entre sí: por una parte una menor dependencia de los adultos, y, por otra, una mayor autonomía personal para actuar en lo que se debe.

Este proceso es de vital importancia para lograr un buen rendimiento escolar.

UN NIÑO RESPONSABLE

Organiza y asume las consecuencias de sus actos.
Las tareas las realiza oportunamente.
Siempre sabrá lo que tiente que hacer
Tiene capacidad de iniciativa para resolución de problemas.
Se siente más seguro de sus actos, lo cual reduce posibles tenciones.

Al hijo se le debe permitir cometer errores, aprender de ellos y valorar y corregir su propia actuación en casa para que así aprenda a actuar con corrección fuera de ella. No obstante recuerde que nunca es demasiado tarde para enseñar a los hijos a ser responsables, pero cuanto antes se haga más fácil resultará el aprendizaje.

Con  una actitud positiva, una fuerte motivación, una gran voluntad, ganas de esforzarse y deseo de triunfar, se superan muchas de las dificultades y limitaciones.

Los padres deberían hacerles ver a sus hijos la relación existente entre el fracaso escolar y los efectos negativos que esto puede tener para su vida futura.

Pero recuerde que se trata de hacerle reflexionar y comprender, no hacerles  sentir fracasados o culpables.

EL PROBLEMA DEL FRACASO ESCOLAR

El estudio debe ser para el niño o el joven una fuente de placer y satisfacción.
Es cierto que este objetivo no es fácil de conseguir debido, entre otros, a dos posibles factores:
- El niño y sus características personales diferenciadoras.
- Las situaciones externas a él que le pueden afectar a sus capacidades y a su motivación, como pueden ser: elementos de distracción (TV, videojuegos, Internet, etc.), una familia poco motivadora y una escuela muy académica.

• Falta de interés por algunas asignaturas (lo que influye mucho en la falta de voluntad y esfuerzo).
• Falta un ambiente adecuado de estudio en casa, lo que repercute negativamente en la motivación.
• Falta de organización en el estudio (falta de planificación y de horario de estudio);
• No saber estudiar (desconocimiento de las técnicas básicas de estudio: esquemas, subrayado).


PARA ALCANZAR EL ÉXITO ESCOLAR HACE FALTA

1. Hábito del estudio.
2. Motivar a los hijos.
3. Dar la importancia adecuada de las calificaciones.
4. La concentración y las técnicas de estudio.

ES LABORE DE LOS PADRES LOGRAR QUE LOS HIJOS SIGAN:

• Un horario fijo y razonable para las comidas.
• Un tiempo de dedicación al estudio.
• Descansos cada cierto tiempo (dependiendo de la edad) entre actividades más difíciles o complicadas.
• Momentos de relax después de las comidas y del fin de las tareas diarias.
• Respeto por las horas de sueño



UN TRABAJO EN EQUIPO ENTRE:
• Los padres y los hijos.
• Los padres y los profesores.
• Los profesores y los niños como estudiantes.


Si se hace, se puede conseguir como resultado unos hijos motivados, eficientes y responsables.

Este video nos da algunas recomendaciones importantes a la hora de estudiar.